La globalización y su impacto en el comercio Mexicano

La globalización es un proceso histórico que ha conectado a los países del mundo a través del comercio, la tecnología, la comunicación y la cultura. Este fenómeno ha tenido un impacto profundo en la economía de muchas naciones, y México no ha sido la excepción. A partir de los años noventa, especialmente con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994, México se integró de forma más activa al mercado global. Este tratado permitió que el país tuviera un mayor acceso a los mercados de Estados Unidos y Canadá, lo que impulsó el crecimiento de las exportaciones mexicanas.

Uno de los sectores más beneficiados fue el industrial, particularmente el automotriz, electrónico y de manufactura. Muchas empresas extranjeras comenzaron a invertir en México, instalando fábricas y centros de producción, lo que generó empleos y fomentó el desarrollo de infraestructura. Además, los productos mexicanos comenzaron a circular con mayor facilidad en otros países, lo que ayudó a posicionar a México como una economía emergente en el contexto mundial. no todo ha sido positivo. 

La globalización también trajo retos importantes. Muchos pequeños productores y empresas mexicanas no pudieron competir con los productos extranjeros, que a veces eran más baratos o de mayor calidad debido a su tecnología avanzada. Esto provocó el cierre de negocios locales, especialmente en el sector agrícola y artesanal. Además, la dependencia de la economía mexicana hacia Estados Unidos se incrementó, haciendo que cualquier crisis en ese país afecte directamente a México.




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